domingo, 13 de febrero de 2011

Identidad, invención y mito

Laudator temporis acti. Dicha locución latina puede resumir el interés que cualquier ser humano siente en algún momento, ya sea al analizar con profundidad el pasado o simplemente al ver la superficie del mismo.

Este libro, Identidad, invención y mito (Ensayos escogidos) viene a servir en bandeja de oro, lo que los intelectuales costarricenses (a partir de Joaquín García Monge) ven en su Costa Rica, hoy de antaño. Un panorama que nos demuestra como de 1920 a la actualidad no somos tan distintos y por el contrario vivimos todavía atados a los mismos yugos de siempre.

Nuestro sino como nación al día de hoy se decanta en un marco donde la historia de la patria misma que esta en juego no es conocida. Ignoramos el pasado y de allí que la ciclicidad de la historia lejos de permitirnos engrandecernos cual otrora, nos obliga a ser fabulación, simulacro del pasado, somos Napoleón III encarnado.

Es ante todo esto que el libro publicado por la Editorial Costa Rica reivindica a figuras intelectuales olvidadas en el país (si es que hay alguna que no haya sido olvidada) y nos brinda sus cavilaciones acerca del ser costarricense - cabe decir que lo hace de una manera muy amena, debido a la corta extensión de los textos -. 

Más allá de seguir con este prolegómeno, dejo un resumen de los ensayos que esta antología presenta, creó que los nombres de los escritores hablan por si solos y cualquiera que pretenda estudiar el ser de esta pequeña nación centroamericana debe tomar su tiempo para leer estas grandes piezas literarias.

Ante el Monumento Nacional - Joaquín García Monge (1881-1958). Publicado recientemente en el blog

Mira y pasa - Omar Dengo (1888 - 1928)

Costa Rica, Suiza centroamericana - Mario Sancho Jiménez (1889 -1948)

El 15 de septiembre es un termómetro que gradúa la tristeza del pueblo costarricense - Vicente Saenz (1896 - 1963)

Abel y Caín en el ser histórico de la nación costarricense - Abelardo Bonilla Baldares (1899 - 1969)

La isla que somos - Isaac Felipe Azofeifa (1909 – 1997)

Los ticos y la máscara - Mario Alberto Jiménez Quesada (1911 - 1961)

Tres notas sobre el carácter costarricense - Luis Barahona Jiménez (1914 - 1987)

El ambiente tico y los mitos tropicales - Yolanda Oreamuno Unger (1916 - 1956)

Uso y práctica del chunche - Alberto Cañas (1920 - )

Debe y haber del hombre costarricense - Eugenio Rodríguez Vega (1925 - 2007)

La Campaña Nacional, crisol de nacionalidad - José Abdulio Cordero (1927 - )

A mí qué me importa - Carmen Naranjo (1928 - )

La invención de un país imaginario - Carlos Cortés (1962 - )

Estos 14 ensayos dan una explicación de nuestra falta de cultura, el porque de las deficiencias en educación, la corrupción política, las campañas políticas clientelistas, nuestro carácter individualista, etc. Lo que merece ser recalcado en cuanto al contenido del libro es su esencia, su existencia como tal. Costa Rica carece de una tradición intelectual continua. Viendo los años de nacimiento de los escritores y estudiando la literatura costarricense del día de hoy descubrimos como hay agujeros muy visibles en nuestro desarrollo cultural-intelectual. Ante este panorama es donde recordar a los grandes intelectuales tiene un aire refrescante, de allí el inicio, ladator temporis acti.

Para los que no puedan adquirir el libro, la mayoría de los ensayos se pueden encontrar fácilmente en Internet con tan solo digitar el título y el autor en Google, no obstante en la página lospobresdelatierra.org se encuentran muchos de ellos.


4 comentarios:

  1. Mucho nacionalismo étnico metafísico, diría don Alexander Jiménez Matarrita (El imposible país de los filósofos, Editorial UCR, 2008).

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  2. Conociendo el libro de don Alexander, completamente leído hace varios años me temo que probablemente usted no tenga mucho conocimiento acerca de literatura costarricense.
    Estos autores no son Aquileo Echeverria con su campesino idílico y Costa Rica de ensueño. Lo invito pues a darse la oportunidad de adquirir el libro y expandir sus conocimientos.
    No siempre el reivindicacionismo histórico ha acertado en el blanco. Aparte, ese mismo libro si bien con premio nacional de ensayo y todo, ha sido muy crítica porque lo que hace es recoger lo dicho ya hace mucho tiempo por otros autores, no es una muy buena referencia.
    Aparte de este libro, leer "Ensayos de Juventud" de García Monge le dará un panorámica de quienes están hablando, no son políticos, y lejos de ese NACIONALISMO ÉTNICO METAFÍSICO, se habla, discute, instruye, etc., de los problemas de las Costa Rica de los años 20-hoy, la pobreza campesina, la corrupción política, las costumbres culturales, muchas situaciones que hasta el día de hoy seguimos viviendo.
    Basta ver que el ensayo de Carlos Cortez "LA INVENCIÓN DE UN PAÍS IMAGINARIO" esta entre los textos antologizados, ese ensayo se recoge del libro "LA CONSTRUCCIÓN DE COSTA RICA" (Editorial de Costa Rica, 2003), esboza la misma tesis que Jiménez Matarrita y con una mayor originalidad.

    Lo invito con todo respeto a que indague el contenido de estos libros, la sorpresa y el conocimiento adquirido puede ser de mucho aprovechamiento.

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  3. Hola, compañero… ;-)

    Gracias por considerar que mis conocimientos sobre literatura costarricenses son insuficientes. No discutiré sobre el particular (no creo que tenga sentido hacerlo); así pues, le otorgo este punto.

    Pero diré algo: ¡en mi comentario no expuse mi opinión personal sobre los textos recopilados en ese libro! Es decir, utilizando mi comentario, no hay pistas para afirmar que tengo (o que no tengo) conocimiento sobre literatura costarricense. Seguramente lo escribí en sueco, y por eso usted lo tergiversó a su capricho. Pero, nuevamente, le agradezco la opinión, y, por supuesto, la recomendación hecha como colofón.

    En la lista que usted enumeró, hay varios autores que se identifican con lo que Jiménez Matarrita cataloga como ‘nacionalismo étnico metafísico’. Por ejemplo, el propio autor menciona que Abelardo Bonilla, Eugenio Rodríguez, José Abdulio Cordero, Luis Barahona, etcétera, son ‘nacionalistas metafísicos’. Eso no lo dije yo: lo dijo el Dr. Alexander Jiménez Matarrita. Me permito, entonces, devolverle el consejo: ¡Lea nuevamente el libro de Alexander Jiménez! Porque, claramente, la primera vez que lo hizo no lo entendió (¿acaso él también escribe en sueco?). Recuerde: “… la sorpresa y el conocimiento adquirido puede ser de mucho aprovechamiento”…

    Finalmente, debo admitir que a mí esas carajadas sobre “el ser costarricense” no me emocionan. Esas elucubraciones son vulgares ‘fórmulas vacías’ (Enrique Pedro Haba). No tienen ningún contenido. Es mera palabrería… ¡y megalomanía!

    Culmino con una observación, sobre el desarrollo intelectual costarricense: en el libro de Jiménez Matarrita que discutimos, él presenta a Constantino Láscaris como el gran pionero de la filosofía en Costa Rica. Tiene muchísima razón. Láscaris fue, también, un intelectual que representa una época en la que el intelectual (filósofo o no) era altamente respetado. Pero después de los 80´s el paradigma cambió (en ‘Ese país donde nunca estuvimos’, don Alexander Jiménez sentencia algo similar). Láscaris muere en 1979, y eso presagiaba tiempos difíciles para los hombres que estaban llamados a ocupar el sillón del insigne filósofo español. Muchas veces se dice que en Costa Rica ya no quedan intelectuales, que todo-tiempo-pasado-siempre-fue-mejor, pero lo cierto es que éstos sí existen, pero no tienen tanta publicidad como otrora. Después de Láscaris vino una camada de tremendos pensadores: Roberto Murillo, Arnoldo Mora, Francisco Antonio Pacheco, Rafael Ángel Herra y hasta el mismo Alexander Jiménez. Pero los costarricenses de hoy son muy sofisticados (¿?) y decidieron no prestarles atención.

    Seamos justos: ¡no digamos que en Costa Rica no quedan intelectuales! (Esto último lo cito al margen de su post, o sea, no estoy diciendo que usted haya asegurado lo contrario).

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  4. Intelectuales...no tengo nada que hablar respecto a Constantino Láscaris, el cual merece el máximo respeto al hablar de filosofía en Costa Rica. No obstante parafraseo a Napoleón cuando dijo que aquel que no conoce la historia esta obligado a repetirla, en fin, el libro lleva por título "IDENTIDAD, INVENCIÓN Y MITO", de allí que pueda inferirse (ya que no esta en sueco) que la idea al ser textos primarios los que se presentan, queda a nivel del lector hacer una lectura crítica de los mismos.
    Si usted es conocedor de la literatura costarricense me extraña que este dispuesto a aseverar con Jímenez Matarrita sobre el contenido de lo que dicen estos autores, al fin y al cabo EL IMPOSIBLE PAÍS DE LOS FILOSOFOS es un libro más, ya que usted lo leyó a profundidad quizá hizo falta un análisis más crítico a la luz de los textos primarios.
    Si, algunos autores rescatan cierto pasado pastoril, no todos, no la mayoría.
    En cuanto a que dicha frase no era su opinión personal...me parece una divagación demasiado vana. Lanzar la piedra y esconder la cabeza, en fin, debe ser tan solo mi impresión.
    En cuanto a intelectuales en la actualidad, si le doy la razón, si hay pensadores importantes. Mi crítica se dirige (lo hice mal anteriormente) a la influencia real en la población que estos tienen. Es prácticamente nula, casi igual que Canal 15, lo ven los mismos que lo producen (metafóricamente)
    A mi por otro parte si me emociona el tópico de la "costarricanidad", pero eso es cuestión de gustos.
    Hago la acotación final de su estilo desaforado a la hora de escribir, en fin, básicamente el libro recomendado no es "Mucho nacionalismo étnico metafísico", esa es mi conclusión. Tiene, probablemente. ¿Cuanto? Ni tan siquiera un 40%

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