Desde El Heraldo de Tegucigalpa hasta la BBC de Londres, desde la mañana en que despertarón a Manuel Zelaya en su casa hasta que lo vinieron a dejar en sus pijamas a mi país (Costa Rica), se ha vivido una época de crisis en Latinoamérica. Muchos podrán pensar que no es más que otra pequeña dictadura en una de las mal llamadas Banana Republics, sin embargo la información, los analistas y todos aquellos seres pensantes y globalizados (no solo globalizados, debe cumplir con la primer característica), saben que hablar de una dictadura en América Latina, ahora en el siglo XXI, más allá de ser algo deprimente, es una situación inaceptable.
El pasado 28 de junio, las fuerzas armadas hondureñas, expulsaron al Presidente Manuel Zelaya, debido a que este deseaba hacer una encuesta(pseudoreferéndum) al pueblo, sin autorización del Tribunal Supremo Electoral y el Congreso, con el proposito de saber si este apoyaría su reelección, en caso de llevarse a cabo un referéndum en el cual se reformaria la Constitución para que se le permitiera al mandatario continuar en el poder. Dado que las leyes actuales no se lo permiten.
Gobierno de Facto
El argumento que utilizó (porque todos los días lo cambian) el actual gobierno de facto para justificar la expulsión del presidente, fue muy sencilla: Su ambición por mantener el poder era inconstitucional, más su actitud irrefrenable. Un gobernador no tiene derecho a pasarle por encima al Congreso o en todo caso al Tribunal Supremo Electoral.
La parte secreta del argumento, que mejor ejemplificada en la imagen adjunta, esa donde se ve a Chavez controlando al Zelaya robotico con un control remoto (muy probablemente marca Acme y comprado con petrodolares). Fueron muy claras las declaraciónes de los actuales gobernantes de Honduras: Yo no quiero a Chavez en Honduras. Esa declaración o idea ha dominado durante un buen trecho de esta crisis, en la cual cada bando tiene sus opiniones, unos más locos que otros, pero cada uno tiene que buscar la manera de justificarse.
Simplemente, la incompetencia de muchos, muchos entes (al final personas) es evidente. Analicemos hechos:
El pasado 28 de junio, las fuerzas armadas hondureñas, expulsaron al Presidente Manuel Zelaya, debido a que este deseaba hacer una encuesta(pseudoreferéndum) al pueblo, sin autorización del Tribunal Supremo Electoral y el Congreso, con el proposito de saber si este apoyaría su reelección, en caso de llevarse a cabo un referéndum en el cual se reformaria la Constitución para que se le permitiera al mandatario continuar en el poder. Dado que las leyes actuales no se lo permiten.
Gobierno de FactoEl argumento que utilizó (porque todos los días lo cambian) el actual gobierno de facto para justificar la expulsión del presidente, fue muy sencilla: Su ambición por mantener el poder era inconstitucional, más su actitud irrefrenable. Un gobernador no tiene derecho a pasarle por encima al Congreso o en todo caso al Tribunal Supremo Electoral.
La parte secreta del argumento, que mejor ejemplificada en la imagen adjunta, esa donde se ve a Chavez controlando al Zelaya robotico con un control remoto (muy probablemente marca Acme y comprado con petrodolares). Fueron muy claras las declaraciónes de los actuales gobernantes de Honduras: Yo no quiero a Chavez en Honduras. Esa declaración o idea ha dominado durante un buen trecho de esta crisis, en la cual cada bando tiene sus opiniones, unos más locos que otros, pero cada uno tiene que buscar la manera de justificarse.
Manuel Zelaya
Este nuevo idolo latino (no exactamente por su fama a través del aclamado programa gringo Latinamerican Idol, ni siquiera lo ponen en español) es una de las figuras más controversiales del itsmo. Fue tal su ambición y su falta de previsión, que ni los congresistas de su partido lo han apoyado. Son pocos los personajes políticos hondureños que se mantienen fieles. La pregunta es ¿por qué se esta dando este fenómeno?[Como costarricense, debo decir que mis declaraciones para Centroamérica, son como escuchar a un argentino opinando sobre una crisis en Bolivia (sea lo que se entienda por eso, no es en un sentido ofensivo). Una vez justificadas mis futuras opiniones, procedo.]
Simplemente, la incompetencia de muchos, muchos entes (al final personas) es evidente. Analicemos hechos:
- El Congreso hondureño lee una carta de renuncia FALSA, ante todo el mundo, desacreditanto (mas de los que ya estaba en cuestión de 5 horas) su nuevo "gobierno".
- Una vez iniciada la crisis, descubrimos la inoperancia de la OEA.
- A la ONU no le interesa, entonces simplemente dice que la OEA se encargara (importante ver el punto anterior).
- Chavez inicia su circo: Goriletti, Peleletti [...] Los derrocaremos, las fuerzas aramadas de Nicaragua se movilizan hacia la frontera y Venezuela ayudara (sigo esperando que un avión venezolano llegue).
- Daniel Ortega, el mono de Chavez, moviliza sus tropas, crea campamentos de refugiados (ni siquiera puede mantener a su propia población y va a ayudar a los vecinos).
- Oscar Arias, crea un plan, el cual no es perfecto, mas ayuda a encontrar una solución. Zelaya lo acepta (buen paso) y Micheletti que por lo visto comienza a darse cuenta de la fatalidad de lo ocurrido, no da el brazo a torcer y dice que es inaceptable que Zelaya (presidente electo democraticamente) vuelva al poder.
- Cuba (osea Fidel Castro) se declara: Oscar Arias, caudillo neoliberal es utilizado por EE.UU. para que la REVOLUCIÓN no se lleve a cabo en ...bla bla bla, lo mismo de siempre.
- Pasa el tiempo, Zelaya habla ante la ONU, nadie reconocera el nuevo gobierno; se habla de las nuevas elecciones en Honduras, para traer estabilidad.
El BOOM!!!
Como diriamos en Costa Rica, recordando una vieja historia, Domingo 7, lo que significa en buen cristiano: Lo hecho a perder todo!!!
La acción de ir a la embajada de Brasil en su país, fue un error y una clara irresponsabilidad
Mañana, 2/3.
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